¿Qué esperás?
¿Qué esperás atado así?
¿Qué esperás atado así?
Yo vi que no había nada.
Tu palabra.
hay que ser muy valiente para desprenderse de lo que uno es, del mundo que nos resulta reconocible y familiar y del suelo que se pisa, para internarse en esos parajes encantados, extraños, para cambiar de piel y ser lo que jamás nos hemos atrevido a ser